TIEMPO: 60 min | CALORÍAS: 350 calorías por persona | DIFICULTAD: Moderada
TIPO DE COCINA: Tradicional | CLASIFICACIÓN: Bollería
Keke Marmoleado
Europa > España > Andalucía
ORIGEN E HISTORIA
El Keke Marmoleado es un postre que se destaca por su combinación de sabores y texturas.
La historia del bizcocho marmoleado comienza en la cocina europea, concretamente en Alemania,
donde se le llama «Marmorkuchen». Luego, con el tiempo, se popularizó en diferentes partes de Europa,
incluyendo España, donde llegó a la región de Andalucía y se fusionó con los ingredientes locales,
adquiriendo su propio carácter distintivo y delicioso.
INGREDIENTES
- 150g de harina de trigo
- 150g de azúcar
- 100g de mantequilla a temperatura ambiente
- 3 huevos
- 1 cucharadita de esencia de vainilla
- 2 cucharadas de cacao en polvo sin azúcar
- 1 cucharadita de polvo de hornear
- Una pizca de sal
- 50ml de leche entera
PREPARACIÓN
- Precalentar el horno a 180°C y engrasar un molde para keke.
- En un bol, batir la mantequilla con el azúcar hasta obtener una mezcla cremosa.
- Incorporar los huevos uno a uno, sin dejar de batir, y añadir la esencia de vainilla.
- Mezclar la harina con el polvo de hornear y la sal, y tamizar sobre la preparación anterior. Integrar suavemente.
- Dividir la masa en dos partes iguales. A una de ellas, agregar el cacao en polvo y mezclar bien.
- Agregar gradualmente la leche a ambas masas para regular la consistencia.
- Verter las masas alternadamente en el molde y con un palillo hacer movimientos circulares para crear el efecto marmoleado.
- Hornear durante 40-45 minutos o hasta que al introducir un palillo, este salga limpio.
- Dejar enfriar antes de desmoldar y servir.
ALERGIAS
Este keke marmoleado contiene gluten (harina de trigo), lácteos (mantequilla y leche) y huevo,
por lo que no es apto para personas con intolerancias o alergias a estos ingredientes.
RESUMEN
El Keke Marmoleado es un postre que se disfruta en múltiples ocasiones.
A pesar de ser una opción energética, ofrece los beneficios de los ingredientes que contiene, como los huevos,
que son una fuente de proteína de alta calidad. La mantequilla proporciona ácidos grasos y la harina contribuye
con carbohidratos para la energía. Es recomendable consumirlo con moderación dentro de una dieta equilibrada.